El irlandés Conor McGregor, estrella mundial de las Artes Marciales Mixtas (MMA), fue condenado este viernes por un tribunal civil de Dublín a pagar casi 250.000 euros [260.000 dólares] en concepto de daños y perjuicios a una mujer que le acusó de violación en 2018.
McGregor, de 36 años de edad, fue acusado por Nikita Hand de «haberla violado y golpeado brutalmente» en una habitación de hotel de Dublín. El deportista afirmó que la relación sexual fue consentida.
Después de un juicio de semana y media, el Alto Tribunal de Dublín decretó el pago de 248.603,60 euros a la mujer. En esa suma se incluyen los gastos por la atención médica recibida.
Nikita Hand, de 35 años de edad, acusó a la estrella de las MMA de bloquearle en una cama y haberle agarrado por el cuello antes de violarla.
Acusó también a otro hombre, James Lawrence, de una agresión sexual en el mismo hotel, pero en ese caso no obtuvo fallo favorable.
Cuando se anunció el veredicto, Hand se puso a llorar y en sus declaraciones a los periodistas afirmó que el juicio había sido para ella «una pesadilla».
Conor McGregor es una de las estrellas del Ultimate Fighting Championship (UFC), la liga más célebre y lucrativa de las MMA.
El luchador irlandés estaba presente en el tribunal con su familia y con su novia, Dee Devlin. Durante el juicio, sus abogados acusaron a Nikita Hand de intentar «extorsionar» a su defendido para obtener dinero.
McGregor no combate en el octógono de las MMA desde julio de 2021 debido a lesión en una pierna. Su reaparición, prevista el pasado junio, se vio aplazada.
En 2020, el irlandés era el deportista mejor pagado del mundo según la revista Forbes, con 170 millones de euros de la época en ganancias
En Dublín, un jurado ha declarado culpable a Conor McGregor de agresión sexual a una mujer en un hotel y le ha impuesto una multa de 250,000 dólares como compensación por daños. pic.twitter.com/ZbqeNlznD9
— ULTIMA HORA EN 𝕏 (@ultimahoraenx) November 22, 2024
La entrada La estrella de MMA Conor McGregor, condenado civilmente por violación se publicó primero en EL NACIONAL.
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